La adolescencia es el periodo en el que todos exploramos nuestra sexualidad y empezamos a definir nuestros gustos, por eso muchos jovencitos experimentan con personas de su mismo sexo para encontrar su verdadera inclinación.
Entonces estás pensando que quizá eres gay y hasta ahora lo descubres o te has negado a aceptarlo por los motivos sociales, bien la buena noticias es que nunca es tarde desde que seas sincer@ contigo mism@ Sin embargo lo que te preocupa es la duda, de repente te ha llegado a la cabeza que podría llamarte la atención una persona de tu mismo sexo a pesar de que ya llevas una vida heterosexual.
Recuerda que la sexualidad es libre y nada de lo que pueda pasar en tu cabeza es malo, siempre y cuando no lastime a otra persona, entonces debes hacerte dos preguntas:
1. Si ves una persona de tu mismo sexo sientes atracción, deseo de besarla, tocarla y hasta de llevarl@ a la cama.
2. Podrías enamorarte de esa persona, tal como es.
Si tus respuestas son positivas probablemente eres gay.
Lo más importante en estos casos es hablarlo, ya sea con un conocido de tu entera confianza, con un profesional que pueda ayudarte a encontrar la verdad dentro de ti o con esa misma persona que ha sembrado la duda en tu cabeza.
No debes avergonzarte si sientes que tus sentimientos son diferentes a los de los demás, pero siempre debes ser sincer@ contigo mismo y con los que te rodean, mucho más si tienes una relación sentimental y ahora tus gustos están cambiado.
Por otro lado es importante tener en cuenta que no es obligatorio estar de un bando, si te gustan personas de los dos sexos, también hay la posibilidad de ser bisexual.
Entonces a disfrutar de lo que sientes y de tu sexualidad libre y responsablemente.
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