Hasta el momento el representante de Dios no ha ido a la cárcel a pesar de haber sido condenado por el abuso sexual que cometió a una niña de 12 años.
En Miranda Cauca una familia era bastante religiosa, acudía a la iglesia Nuestra Señora del Rosario todas las semanas y participaba de las actividades religiosas especiales, siempre lo hacían en familia.
Para la familia la iglesia era su círculo social, la menor era monaguilla y participaba en el grupo juvenil pastoral.
Pero un día el sacerdote Arcángel Acosta Izquierdo pidió a los padres de la niña que le permitieran quedarse durante el día para que le ayudara con algunas actividades como fotocopias y organizar los detalles de un evento para el día siguiente.
La familia no dudó ni un momento en permitir que su hija sirviera a Dios por medio del servicio pastoral en la iglesia, además el cura era de su confianza, casi de la familia.
La niña llegó a la iglesia y Acosta la hizo esperar en la habitación de la casa parroquial, allí fue donde accedió carnalmente a la monaguilla.
Al parecer todo estaba normal, la niña colaboró con las actividades del día y todo transcurrió según lo planeado, la niña no comprendía muy bien lo que había sucedido, pero sentía que no estaba bien.
Entonces confió en una amiguita del colegio a la que le contó lo sucedido, con la suerte de que la niña contó en el colegio lo que su amiga le había dicho y desde el colegio hablaron con los padres y denunciaron al cura.
Fueron días difíciles para la familia ya que los vecinos los acusaban de pretender perjudicar al sacerdote, entonces no solo lidiaron con el abuso de la menor sino que perdieron ‘amigos’.
Quienes los apoyaron recibieron igualmente la reprimenda social, inclusive algunas personas les ofrecieron plata para retirar los cargos, pero ellos prefirieron hacer valer la palabra de su hija.
Casi no salen a la calle porque todos se han convertido en sus enemigos, parece que la gente prefiere ocultar los abusos que enfrentar la desilusión de ver que un representante del cielo puede ser un gran pervertido.
Hasta el pasado 17 de agosto que la fiscalía le dio la razón a la familia y condenó a Acosta por acceso carnal abusivo con menor de 14 años, ahora se espera la sentencia que podrá ser hasta de 16 años.
Sin embargo el abogado de la familia dice que no ha sido detenido y que continúa viviendo en una casa del pueblo como si nada pasara, con el riesgo de que haga lo mismo a otra menor y como dice la misma familia que se vaya a fugar sin pagar su delito.
En la investigación encontraron que trató de convencer a otras niñas de ir hasta su habitación, pero como no logró llegar a abuso, las familias decidieron no unirse a la denuncia.
El cura fue retirado de sus labores por la curia y la familia de la menor nunca volvió a la iglesia, ahora hacen sus oraciones desde la casa.
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