Después de manipular a sus hijos y obligarlos a mentir, ellos se arrepintieron y confesaron el asesinato que Joseph cometió.
Joseph y Lauren DeWise llevaban años casados, pero los últimos habían sido muy tormentosos, los vecinos y familiares los veían discutir acaloradamente muy seguido, era inminente una separación.
Vivian en Bozeman, Montana y Lauren estaba siendo acusada de serle infiel a su esposo, por lo que tuvo que irse de su casa y unas amigas la alojaron, mientras organizaba su vida.
Joseph se quedó en casa con los tres hijos, dos de él de su matrimonio anterior y el que habían tenido juntos.
Lauren estaba tratando de organizar su vida y tenía una cita con Joseph para acordar las condiciones del divorcio.
Justo ese día en la mañana una de las amigas de Lauren llegó al apartamento y encontró que había habido una balacera, Lauren había perdido la vida y la amiga gravemente herida.
Por supuesto para la policía el primer sospechoso era Joseph, encontraron en el teléfono de Lauren conversaciones con amenazas y fuertes expresiones, también ella había confesado a sus amigas que él era bastante agresivo y abusivo.
Sin embargo él declaró que la noche del asesinato estaba en casa con sus hijos viendo televisión y aunque ellos inicialmente confirmaron la historia después cambiaron su versión.
Joseph fue arrestado y siempre se declaró inocente, a pesar de que la investigación siempre lo apuntaba como culpable.
No obstante no lograban encontrar las pistas definitivas para declararlo culpable, hasta que su hijo mayor Joe decidió declarar y contar toda la verdad.
El joven tuvo que acompañar a su padre a asesinar a su madrastra, hacia las tres de la madrugada los dos entraron por la parte trasera de la vivienda de las mujeres, Joe solo siguió las instrucciones que su padre le daba en cada paso.
La amiga de Lauren también recibió disparos solo porque se equivocaron de cuarto al entrar, según declaró el joven que siempre estuvo bajo la presión y manipulación de su padre.
Pero no termina aquí la maldad de Joseph, después de ser ingresado a la cárcel, llamó a su hija Natalie a quien le pidió que convenciera a Joe para que dijera que él había sido quien había disparado, según dijo por su edad y la situación en la que estaba no tendría tanto tiempo en la cárcel.
Mientras tanto la amiga de Lauren se recuperó en el hospital y declaró con detalle lo que tuvo que vivir esa terrible noche.
Joseph fue condenado a 220 años de prisión y deberá pagarle a la sobreviviente la suma de 25 millones de dólares.
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