La Fiscalía General realizó la captura de cinco personas por presuntamente torturar a pacientes de la IPS Resurgir a la Vida ubicada en el barrio Normandía.
Las víctimas presuntamente habrían sido torturados física y emocionalmente dentro de la institución Resurgir a la Vida
Uno de los internos del lugar envió la siguiente carta a sus familiares: “Madre espero que te llegue este mensaje. En estos momentos temo por mi seguridad. En los últimos días se ha vuelto un ring de peleas, en toda oportunidad vuelan puños y patadas. El otro día golpearon entre cinco personas a un muchacho y nadie hizo nada, los directivos lo permiten. En las llamadas no puedo decirles la verdad porque antes de la llamada nos dicen qué decirles a los padres, si no nos quitan las almohadas y todo tipo de comunicación, desde hace dos semanas un grupo de muchachos me agreden y me amenazan con que me van a golpear. Ahora que la doctora no está se han vuelto cotidianas las amenazas. Me siento angustiado y miedo de no saber cuándo me hacen daño. Son varios los incidentes. El solo hecho de que escriba este mensaje es un riesgo para mí, por eso les pido no decirle a nadie”
Esto prendió las alarmas de y las autoridades empezaron una investigación en al que pudieron descubrir varias irregularidades.
Por ejemplo, al ingresar a los internos tenían un ritual del tipo película de terror, los jóvenes eran desnudados, amarrados, bañados con agua fría y con mangueras y golpeados con las escobas que usaban para restregarles el jabón.
La convivencia era difícil para varios de ellos ya que eran incitados a pelear entre compañeros, las directivas no solo permitían si no motivaban las disputas entre internos, mucho más si había golpes y agresiones físicas.
Aunque el lugar tenía espacio y autorización para 25 pacientes, realmente tenían más de 40, por lo que estaban en constante hacinamiento en todas las instalaciones, además de que no contaban con espacios al aire libre ni ventilación natural, los pacientes tampoco podían salir a la calle.
Las llamadas a familiares eran escuchadas y supervisadas por el personal de la IPS, los internos eran amenazados antes empezar las llamadas para que no revelaran ninguno de los malos procedimientos que a diario sucedían.
Aquellos a los que estaban pasados de peso, eran amarrados a la hora del almuerzo obligándolos a mirar a sus compañeros comer mientras ellos deberían pasar sin alimentarse supuestamente para obligarlos a adelgazar.
En el operativo La Fiscalía descubrió que ninguno de los encargados de la atención de los internos tenía estudios en salud, uno de ellos era Ingeniero civil y los demás son entrenadores físicos.
Fueron cuatro hombres y una mujer capturados y serán judicializados por actos de violencia dentro de la IPS.
También han aparecido quejas sobre la forma como fueron internados algunos de los pacientes, esta IPS se encargaba de tratar a personas con problemas de adicción y desórdenes en el comportamiento. Según denunciaron algunas víctimas eran llevados hasta allí con engaños a sus familiares e inclusive algunos con violencia, pues eran amarrados y entrados a la fuerza al ritual de baño.
Hasta el momento la IPS no se ha manifestado sobre los hechos, su página web se encuentra caída pero algunos comentarios en Google de usuarios hace meses atrás ya evidenciaban lo que ocurría al interior de la institución.
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